Si es verdad que cada día son más los nombres de etiqueta que dicen mucho del vino, Finca Piedras infinitas habla por sí solo. Elaborado por Zuccardi, considerada la mejor bodega del Nuevo Mundo, se trata de un vino que procede de una finca en la que antes nadie había podido cultivar a causa de una piedra muy difícil de trabajar. Fue gracias a la insistencia de Sebastian Zuccardi, tercera generación de esta prestigiosa familia vitivinícola, quien intuyó en la zona más alta del maravilloso Paraje de Altamira, en el Valle de Uco de Mendoza (Argentina) una enorme diversidad de suelos para poder interpretarlos a través del vino. Una osada aventura que necesitó más de mil camiones llenos de piedra para poderle hacer sitio a la vid.
Es así como nace Finca Piedra Infinita, un vino de montaña que procede de cepas de malbec a 1100msnm y qué gracias al abanico aluvial del río Tunuyán, sus suelos se caracterizan por ser muy heterogéneos, pedregosos y calcáreos. Se practica una agricultura tradicional y la vendimia es manual con selección de racimos. Una vez en bodega, la vinificación se lleva a cabo en depósitos de hormigón con levaduras autóctonas. Después, una parte del vino realiza una cría en barricas de roble francés de 500 litros usadas y el resto del vino cría en depósitos de hormigón.
Visto lo visto, tan solo un apellido como Zuccardi que se ha labrado un nombre de gran prestigio dentro del mundo de vino, podía adentrarse en una labor de tan gran envergadura. Un arduo trabajo, que realmente ha valido la pena, porque Finca Piedra Infinita es toda una maravilla que resalta el máximo concepto de un terroir único e irrepetible.
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