al y como dijo la propia Coco Chanel “La moda pasa, el estilo permanece”. Hay clásicos que siempre serán un acierto como Torelló Tradicional Brut Nature, uno de los espumosos más clásicos de las bodegas Torelló con una crianza de más de 60 meses.
Hablar de Torelló no sólo supone hacerlo de uno de los grandes productores de burbujas en España -todo un referente que desde el siglo XIV elabora espumosos desde Gelida, en el Alto Penedés (Barcelona)-; sino también de una de las empresas que más se comprometen con el futuro del sector gracias a su fuerte compromiso como uno de los fundadores de Corpinnat (marca colectiva, a la que también pertenecen otras grandes bodegas de la zona, que tiene como fin poner en valor los grandes espumosos elaborados en pleno corazón del Penedés). En el caso de Torelló Tradicional Brut Nature es un espumoso clásico que a pesar de su carácter tradicional ha sido capaz de sorprender a los mejores paladares del mundo, consiguiendo en el 2022 la Medalla de Oro en los Decanter Wine Awards.
No obstante, para que las ramas del árbol lleguen lejos y sean grandes, siempre es necesario contar con unas raíces fuertes y profundas. En el caso de Torelló esta base fuerte se encuentra en su historia y en Can martí, una finca de 137 hectáreas que crece sobre suelos arcillo-calcáreos. De ellas, 80 hectáreas se trabajan en ecológico para cultivar 11 variedades distintas entre las que se encuentran la macabeo, la xarel.lo y la parellada con las que se elabora el coupage de Torelló Tradicional Brut Nature. Este último detalle, el del cultivo en ecológico, es muy importante, ya que el total respeto del fruto y la tierra será uno de los requisitos indispensables que defienden a capa y espada en Corpinnat. Tan sólo de esta manera,-evitando el uso de productos químicos y utilizando otros de origen natural- se puede garantizar la suprema calidad de los espumosos.
Otro de los requisitos indispensables de Corpinnat es la elaboración íntegra en la propiedad. Y así lo cumplen también en Torelló. En concreto Torelló Tradicional Brut Nature comienza en el propio campo, con la vendimia manual, en cajas de 25 Kg, donde se busca en todo momento salvaguardar el estado de la uva. Así, sin aplastamientos y de forma cuidadosa, los racimos llegan enteros a la bodega y pasan por una mesa de selección. Todas las variedades serán trabajadas por separado y se estrujarán suavemente. Desde la prensa, que cuenta con la tecnología Inertys (gracias a la cual se consigue esquivar la oxidación), los mostos fermentan en depósitos de acero inoxidable y son ensamblados y embotellados, preparados para realizar la segunda fermentación en botella.
Aquí, en espera, Torelló Tradicional Brut Nature pasará un mínimo de 60 meses con sus correspondientes poignettage (agitaciones en botella), donde las levaduras se mezclan con el vino. Por último Torelló Tradicional Brut Nature se clarifica manualmente en pupitres se degüella y se vuelve a embotella sin añadir nada de azúcares. La mejor opción para los amantes de los espumosos secos en su vertiente más clásica.
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